Una de mis películas, preferidas de este año ha sido “Into the wild”, que ha dirigido Sean Penn. Basada en el estupendo libro de Jon Krakauer (publicado en España como “Hacia rutas salvajes”), cuenta la historia de Christopher McCandless, un joven americano de familia bien que a los 22 años decide donar sus ahorros a la beneficencia, cambiar de nombre y embarcarse, tras cortar todos sus lazos familiares y amistosos, en un viaje hacia el mágico norte, hacia esa mítica tierra llamada Alaska. Movido por el rechazo al materialismo asfixiante y las convenciones sociales (la hipocresía) de nuestra época, Chris atraviesa desiertos, navega por el cañón del Colorado, trabaja en el campo en Dakota e intima por el camino con un puñado de personas en las que dejará una huella indeleble. Porque, a pesar de su individualismo feroz y su creencia en que no deberíamos buscar la felicidad en las relaciones personales, la vitalidad contagiosa y la honestidad salvaje de este chaval acaban por meterse bajo la piel de quien se cruza en su camino. El entusiasmo de Chris por la naturaleza y el rígido código moral al que se sometía se gestaron durante años solitarios en los que (decepcionado por las mentiras y la ostentación material de sus padres y por la vacuidad de su vida de estudiante) se refugió en la lectura de los clásicos rusos, las trepidantes novelas de Jack London y los libros del gran H. D. Thoreau. Fue Thoreau el que escribió: “me fui a los bosques porque quería vivir a conciencia” y no es difícil ver la poderosa llamada que estas palabras debieron ejercer sobre la imaginación de McCandless. Chris quería experimentar la furia de los elementos sobre su cuerpo, luchar a solas por su supervivencia y descubrir, a base de llamar las cosas por su verdadero nombre y de prestar atención a las fuerzas básicas de la vida, la verdad última sobre sí mismo. El relato de su búsqueda es un viaje apasionante, una apología de la libertad, de la belleza de seguir la llamada de la naturaleza, esa que esta ahí afuera, en la cumbre de las montañas, en la sangre de los árboles y de los ríos, en los ojos de los animales y también, aunque se nos olvide, agazapada en el último rincón salvaje de nuestros corazones.
“Into the Wild” se estrena el 4 de enero en España.
“Into the Wild” se estrena el 4 de enero en España.
No comments:
Post a Comment